El día que conocí a mis suegros

Hoy conocí a mis suegros, o a los padres de mi novia, para los que quieran reservarme un mínimo de soltería. En esta ocasión fue todo muy sincero. Comenté lo que hacia de mi días, como era mi familia, y hablamos de frivolidades para pasar el tiempo.
Fue diferente al enfrentamiento con mis anteriores suegros. En otros tiempos, no sé si por presión, por presunción, por fama, o simplemente por mentiroso comentaba ficciones. No abría mi interior para contar todas mis miserias, mis noches de juerga, mi sueños de diez de la noche a cuatro de la tarde; más bien me limitaba a poner en presente lo que yo quería llegar a ser en un futuro. Esto era ser un hombre de rutina, ordenado, pero con pasión, protector de la salud física y mental, un buen escritor, deportista, amante del buen vino pero de manera moderada; es decir el equilibrio al que todos alguna vez aspiramos. Toda esta situación hacia que yo lograra un cariño especial desde un comienzo.
Una vez, conocí a un suegro cuando él se ejercitaba en su bicicleta fija. En el instante siguiente al saludo de manos, que por cierto de parte de él fue un buen apretón, le dije:- Lindo día para el ejercicio- con tono simpático, en un acto de compasión intentando que no se aburriera, ya que por mi parte odio toda clase de actividad física individual.- ¿Te gusta andar en bicicletas?- me preguntó, mirando en forma despectiva mis alargadas piernas flacas.Y yo no podía contarle que había tenido un intento de mountain bike entre los dieciséis deportes que practiqué en forma efímera en mi infancia. Por eso contesté:-La verdad me gusta bastante, pero ahora sólo hago spinnig en el gimnasio- y como desviando la atención de él, por si me preguntaba sobre mis andares sobre las dos ruedas, le continué diciendo- porque estoy muy apretado con mi estudio y mi escritura.Luego me arrepentí de haber comentado sobre mi escritura, ya que él era un gran lector. Debí haberlo supuesto, si su casa estaba casi amueblada de libros. Entonces dijo:-Mira vos… ¿escribís?- indagó subestimándome.- Sí, me gusta mucho escribir cuentos- Afirmé, adelantándome con los cuentos, que yo pensaba, eran mi fuerte.- Cuentos, me gustan los cuentos. Me gustaría que algún día me dejaras leer alguno ¿si no te molesta?- me dijo, pidiendo permiso por si yo era uno de esos extraños seudo autistas reservados.- ¡Como me molestaría! Sería un halago para mí que usted leyera mis cuentos. Veo que es un hombre amante de la lectura-Casi gritando le afirmé, mis palabras llenas de protocolo. Mientras se bajaba de su bicicleta y secándose el sudor de la frente, dijo sonriendo:- Me gusta leer, me gusta- y despidiéndose con un saludo de manos, mucho más amistoso que el de apertura, continuó- Bueno querido, fue un gusto conocerte, si quieren algo me avisan.En un principio la relación de él con la ficción que yo era, fue muy buena, pero con el tiempo murió mi alter ego. La defunción se dio por diversas pistas que se me escapaban en mis comentarios, o que yo mismo sin darme cuenta, confesaba.
Descubrió que yo escribía cuentos pésimos, casi sin sentido, infantiles como los de un niño. Y como los de un niño que cursa el quinto grado, más o menos cuando le comienzan a enseñar narración, en una institución con orientación técnico-matemático. Advirtió que realmente no me gustaba hacer spinning; y mucho menos andar saliendo a sudar al aire libre, para que la gente me viera agonizando; y que sólo hacia gimnasio por que mi padre me maltrataba todo el tiempo, diciéndome que era un ocioso improductivo casi convertido en hongo.
Aún así, conmigo, con mi verdadero yo, la relación fue cordial. No sé si en su momento no le prohibió a su hija salir conmigo, porque pensaba que en el fondo yo era un chico bueno, porque a pesar de haber mentido le resulte gracioso, o porque su hija era su debilidad y le habría rogado. En fin, las cosas siguieron bien con él hasta el día de hoy, más allá de que yo no siga con esa novia. Hoy, hasta somos amigos. Él también me mintió, me enteré luego de la ruptura con mi ex. Él tampoco leía, los libros eran de su suegro; y tampoco le gustaba andar en bicicleta, lo hacía por que su mujer no quería acostarse con él, porque decía que estaba muy panzón, y el sexo pasaba de ser placentero a una especie de tortura.Seguramente a los que estén leyendo esto, les paso alguna vez algo similar ¿O me van a decir que no? Que ustedes son unos rebeldes desafiantes, que van, antes de cualquier saludo de cordialidad, y le dicen a su suegro: “Yo soy el que sale con su hija, los días en que ella pide permiso para ir al cine. Eso del cine, una mentira. Tranquila mi amor no te preocupes, sé lo que digo. Y realmente lo que hacemos es ir a disfrutar en algún callejón perdido de la confusión de nuestros cuerpos dentro de mi hermosa Meriva monovolumnen. Para, tranquilízate. Luego, cuando con mis padres y mis hermanos menores me voy de paseo al campo; y el ingenuo de mi padre dice contemplando el paisaje, que no hay nada más bello que el aroma de la naturaleza; yo pienso, mientras sonrió en mi complicidad, que el único olor que siento es de la naturaleza del cuerpo de su hija”.
No, es de conocimiento público que nadie sería tan imprudente, más allá de que sea cierto o no. Y si lo hicieran, es obvio que en el momento siguiente, su suegro pasaría a ser padre de su ex novia.
Esta vez, el encuentro con mis actuales suegros fue diferente, fue sincero. No al punto de un rebelde desafiante, pero sincero. Creo que fue, porque ya llegué a lo que quería ser, o porque ya no me interesa llegar a ningún lado.

Burbujas

Maria odia la rutina. Maria no odia tanto la rutina, sino que yo no sea parte de ella. Es terca y caprichosa, no comprende mi alma solitaria e independiente de tigre. Pero hoy me enteré que esto no es lo que más odia Maria, ella por sobre todo odia las burbujas de la soda. Esta confesión me la hizo a mí, bah, más bien se la hizo a su amigo Martín luego de que él contó que odiaba las plantas, pero yo estaba presente.
Debo contar que en el ínterin del secreto entre amigos, me afirmé contra el respaldo de la silla por un empujón de mi propia carcajada, recordando que Martín era de apellido Flores.
La confesión de María se produjo bajo el efecto de unos tragos y de un viento contenedor de esta noche de verano. A mí me dejó sin aire. Perplejo. Yo soy amante de las sodas, sobre todo las de sifón que vienen aun más contaminadas de gas. No hizo falta una declaración mía, pues ella lo sabía. Lo sabía y nunca me lo había reprochado. En ese instante comprendí que ella no amaba solo a sus éxitos y a su afeminado perro malcriado. También me amaba y ahora solo pienso en pasar mi vida con ella.

De vuelta a casa

Hola gente, ¿cómo andan? Disculpen mi ausencia, pero necesitaba nutrirme de aventuras para luego poder vomitar en el blog.
Es cierto, parecería que el tiempo se excedió un poco en el supuesto que se trate de solo una búsqueda de aventuras. Pero no, debo confesarlo hay mucho de voluntad mía en el emplazamiento. Quería comprobar cuanto me podían desear. El resultado dos entradas, una de mi novia y otra mía desde una computadora de cyber -por eso en este momento siento que le hablo al aire o en su defecto, a mi mismo-. Fui a ese refugio de la pubertad con la ensanchada percepción de que mi computadora no había registrado bien los ingresos. Pero fue una equivocación mas en mi vida. Ya que el asistente del cyber me aclaro inmediatamente, arrancándome toda ilusión que para entonces ya eran como sacar una Sequoia de raíz, que los Hosting Service Provider (Proveedores de Emplazamiento de Hospedaje) eran en todo caso los que podrían haber tenido el problema en cuanto a la registracion de las entradas. Lo que por cierto, con la evolución de las tecnologías, era sumamente difícil.
Cabe decir, para los que no entiendan, con respecto a cuanto me podían desear, que la gente importante se hace esperar. Pero ya entendí con todo esto, que muy poco tengo de importante –por no destrozarme con un nada-.
Bueno. ¿que aprendí en mi tiempo de ausencia?; ¿que aventuras viví, historias coseché?. NADA. Me la pase con la absurda fijación de entrar al blog esperando entradas. Esta bien, debo reconocerlo que la situación me dejó dos enseñanzas –que me resistía a comentar, pero bueno ya me encontré con la verborragia-. Por un lado, aprendí que lo de hacerme el frontal en la presentación del blog, que entre el que quiera, la honestidad brutal, etc. tiene menos convocatoria que el programa televisivo de esa señora que desvaría, llamada Rita de Lazari, sin la publicidad gratuita que le ofrecen programas como tvr, ojo cítrico, pnp. Por otro lado, que a la gente le gusta que la seduzcan, que le digan que una cámara de foto tiene un millón de píxeles sin saber siquiera que es eso, que el auto tiene cien caballos de fuerza como si alguna vez lo fueran a usar, que una computadora tiene acceso inalámbrico a Internet mientras viven en una provincia que con suerte tiene electricidad. Por eso de ahora en más, pido a las pocas personas que entraron y me propongo yo mismo hacerlo, a fomentar este blog. Y cuando nos pregunten qué tiene, diremos un millón de píxeles, cien caballos de fuerza y conexión a Internet inalámbrica.

Minihistorias I -

Esponja Cronopìal

Paradójicamente materializo, desde su irónica postura de creador,
al mayor cronopio cortaseano en una esponja cuadrada, con pantalones cuadrados y que se transmite en una caja cuadrada...

Seguramente Stephen Hillenburg leyó Cortazar antes de crear a tan representativo personaje cronopial.

Refugio para un cogito herido. Oferton!

Voy a contarles que no es lo mejor que me puede pasar tener que presentarme a mi mismo. Si bien no estoy por presentar a mi persona directamente, voy a hacerlo con respecto a un producto de esta: el blog.
Esto me llevaría a posicionarme en una situación de comerciante. Por que lo que yo busco al fin y al cabo es que tenga concurrencia -no les voy a esconder mis intenciones disfrazando el blog con un "simplemente quiero vomitar mi verdad"-, por tanto debo venderlo.
De esta manera, farabuteando como buen comerciante verborragico, diría: "Cuando Francis Bacón se refirió a la lectura como un complemento que hace completo al hombre, no hablaba de cualquier lectura. Hablaba de la lectura de este blog. Si!!, aunque no lo crean. A pesar de haber vivido en el siglo XVI, donde no existía mínimo vestigio alguno de computadoras, de internet y mucho menos de los blog que hay dentro de estos, él igualmente sabia que vendría este blog. Era en su entera esencia un visionario. En este blog van a poder encontrar conexión con las mil y una noches modernas (con todo lo estridente que esto implica), con las sietes maravillas del mundo (tanto las viejas como las nuevas!!! -aunque poca relación posea-), con lo sobrenatural (Oh si!!! todo lo eso que siempre quisiste saber sobre el mas allá), con...¿VOS QUE QUERES? ESO, TAMBIEN LO ENCONTRARAS. Lo mejor de todo es que es de conexión rápida y fácil acceso. No se vende por catalogo. Sin obligación de compra. Promoción valida hasta agotar stock."
Pero debo ser fiel a mi pensar, por eso que no les voy a venir con una farsa. Me limitare a la honestidad brutal.
Acá voy expresar todo lo que Pandora hizo en mi, y pudo haber hecho en ustedes. Como pudó haber quedado nuestro cogito luego de haber caído en su tentación.
Debo decirles que todo lo que encuentren aquí no es realmente lo que me sucedió o me pueda llegar a suceder, ya que se trata de lo que yo puedo haber sentido sobre los hechos. Ya lo expresa Frued, "Lo importante no es lo que uno ha vivido, sino como uno lo ha vivió". Por tanto todo lo que se pueda ver en este blog se encuentra totalmente destrozado por mi procesadora mental.
Espero que a través de este blog dejen sus cometarios sobre lo que yo exprese. Lo único que se exige para el acceso al contenido es apertura de mente, nada mas.
Como complemento de la lectura les recomiendo cualquier estimulante - sano por supuesto :@-
Bueno, cerrando la presentación. Espero que lo disfruten, -dejando el protocolo de lado- y sino váyanse al carajo a leer Coelho!!!!!!!!

Brtiney Superstar

Domingo 2 de Diciembre del 2006. Llego a las 3:00 a.m. del cine. Vengo de ver "El juego del miedo 3 (Saw 3) ", que por cierto me dejo mucho que desear y solo se limito a mostrarme cual es el punto de frontera donde puede llegar la imaginación de una mente retorcida.
Abro el diario "La Gaceta de Tucumán", voy hojeando de atrás para adelante -como buen morboso seguidor de novelas policiales y populares que por desgracia debo admitir que soy-: “Ordeno el fiscal Rosendi la extracción de sangre para la prueba de ADN”, “Mato a su hermano de 20 puñaladas”, “Martín –el mago- Preterí se escapo nuevamente de Villa Urquiza”. Imagínense como pudo haber estado mi animo con esa hemorragia cerebral, ya que venia del terror del cine al terror de los diarios. Teniendo en cuenta además que la realidad supera a la ficción.
Bueno, pero no les voy a compartir este tipo de cosas, por que solo deben agarrar las sensacionalistas prensas nacionales para informarse.
Les quería comentar algo que vi en la sección “Espectáculos” del diario antes mencionado. Es sobre la cantante Britney Spears, esa tímida adolescente que se llevaba las aplausos de todo un mundo. Del mundo de la pubertad, tanto de varones -contandome a mi- como de mujeres. Eso si, estos dos últimos tenían entre sí diferentes causas del porque de los aplausos.
Hoy, con veinticinco años de edad, dos hijos encima y un divorcio reciente...se encuentra en su madurez. Pero no en una madures metafórica, sino en serio, no se sabe que le sucedió durante su ausencia. Como si un tren de transporte ganadero hubiera pasado por encima de su tronco. Tanto es así, que arriesgo a decir que tuvo el cambio que Isabel "Coca” Sarlí sufrió de los setentas al hoy, es decir treinta y seis años, en seis años. ¡Que locura! -en este momento me estoy sintiendo un poco caradura (esta bien, quizas bastante) por mi exagerada expresion, por eso me sincero y aclaro que esto no cambia para nada mis ratones hacia ella-.
Quiero sentar que esto no me resulta inquietante a mi en ningún sentido. Adonde realmente quiero llegar con lo escrito, es a una critica hacia las compañías de música multinacionales. Ya que explotan a una adolecente para exprimir millones de ella, sin darle el mas mínimo consuelo psicológico, para luego dejarla tirada. Así sin mas, la dejan abandonada, con su vacía vida al no haber vivido muchos años – su juventud precisamente- por haber trabajado para un tercero explotador. ¿Y por que la hacen a un lado reemplazándola por una nueva adolecente cara bonita, rubia y de ojos claros? Porque ahora es gorda y con problemas familiares, por ende ya no vende. Es como si se hubiera celebrado entre los padres de la jovencita y la productora musical un contrato de leasing. El leasing consiste en que se paga cierto dinero en calidad de alquiler de un determinado objeto, por un periodo de tiempo fijado, pasado el tiempo acordado se ofrece una opción de compra para el que paga el alquiler. En el caso de la cantante la compra no se concreto.
Querría dejarles, como opinión personal a las soñadoras niñas, que no se dejen comprar las ilusiones por estas vigorexicas empresas depredadoras, que no se dejen hacer como Joaquín Sabina expresa unas “Barbie superestar”. Sino un día se encontraran sin saber por donde pisar por haber salteado etapas, por haberles sucedido lo que al DIEGO, que dijo una vez “Me metieron una patada en el culo y me mandaron de Fiorito a Roma”

Crash- 15/08/05

Crash, se rompió un silencio en un simple instante.
Todo como un nada y si es que era un cambio en medio de la inmensa nada, o el inmenso todo.
Y las mochilas aun vacías, con poco cargar pero la vida con mucho andar. Igual crash y te pones a pensar...
Crash, hacia donde correr o caminar si el mundo se va y uno simplemente se quiere quedar a bailar. Pero nuevamente esta el crash que no te deja pensar...
Crash, como una gota que en un extenso lago se hace notar, y que mas, y que mas es ese crash que quizás en la noche a los sueños no nos deje escapar.
Crash, muriéndome en la superstición creyente de siete años de mala suerte.
Crash, maldito espejo por que de mis manos te fuiste a escapar, y en pedazos al suelo fuiste a terminar, crash...